El ministro del Interior se dice "horrorizado por la crueldad de los grupos armados ilegales"
La localización de los cuerpos es fruto de la ley de justicia y paz, señalan autoridades
DPA , AFP
Con el hallazgo de este sábado se eleva a más de 700 el número de muertos que han sido localizados en todo el territorio. Foto: Ap
Autoridades levantan los restos de 57 personas que fueron encontradas el pasado 26 de abril en la ciudad La Cooperativa Foto: ReutersSanta Fe de Bogotá, 5 de mayo. Autoridades colombianas reportaron este sábado el hallazgo de 105 cadáveres en fosas comunes, presuntas víctimas de grupos paramilitares, en el departamento de Putumayo, zona sur del país que colinda con Ecuador, entre los cuales habría varios ecuatorianos, elevándose así a más de 211 el número de cuerpos que han sido descubiertos en los pasados cuatro meses. En todo el territorio han sido localizados más de 700.
"Hay que advertir en este momento que parte de las víctimas eran extranjeros, en este caso ecuatorianos", manifestó el fiscal general de la nación, Mario Iguarán, en una conferencia de prensa. Agregó que en la zona de Putumayo, en la que actualmente se llevan a cabo las excavaciones, podría haber hasta 3 mil cuerpos sepultados en fosas comunes.
Iguarán no supo precisar cuántos ecuatorianos habría entre los 105 cadáveres hallados, "la mayoría desmembrados", según indicó, pero afirmó que la fiscalía ya está sistematizando la información para establecer la cantidad de víctimas del país vecino.
Los 105 cuerpos exhumados fueron localizados en 65 fosas comunes descubiertas en seis zonas rurales diferentes del municipio La Hormiga, departamento de Putumayo, fronterizo con Ecuador y Perú.
Con este hallazgo se incrementa a 211 el número de cuerpos encontrados en fosas comunes en distintos lugares de Putumayo, en los pasados cuatro meses, mientras en todo el país el descubrimiento de fosas comunes eleva a más de 700 la cifra de presuntas víctimas de los paramilitares de extrema derecha, expresó Iguarán.
"Fueron encontrados los restos de campesinos de la región, paramilitares, inclusive personas que se cree son extranjeras, por señalamientos que han hecho familiares en Ecuador", declaró el funcionario a periodistas colombianos.
Iguarán indicó que los cuerpos corresponden a personas ultimadas por parmilitares del Bloque Sur, de las desarmadas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Por su parte, el ministro de Interior y Justicia, Carlos Holguín, precisó que las excavaciones las llevan a cabo agentes de la fiscalía y de la policía judicial (Dijin) desde hace cuatro semanas en los municipios La Hormiga, San Miguel y La Dorada.
Holguín se declaró "sorprendido y horrorrizado por la crueldad de las matanzas que los grupos armados ilegales cometieron en su insaciable afán por apoderarse del territorio para ponerlo al servicio del narcotráfico.
"Para nadie es secreto que esas masacres son producto de la lucha entre las FARC y las AUC por el dominio de ese territorio, que era controlado en 1999 y 2000 por la guerrilla", resaltó.
El funcionario explicó que el descubrimiento de las fosas se logró gracias a información que suministraron algunos ultraderechistas desarmados bajo la cuestionada ley de justicia y paz.
Los hallazgos se dieron en momentos en que el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, propuso que paramilitares y rebeldes desmovilizados se sumaran a la Defensa Civil de Colombia. "Se buscará la manera de que los reinsertados se incorporen adelantando trabajos comunitarios en diferentes zonas del país, pero todos tendrán rentrenamiento", explicó el ministro de Defensa.
Las AUC empezaron el primero de julio de 2004 negociaciones de paz con el gobierno del presidente colombiano Alvaro Uribe, en el contexto de las cuales se desarmaron unos 31 mil hombres. Aún queda una escuadra disidente por desmovilizar.
Holguín afirmó, por otro lado, que el descubrimiento de las fosas "es uno de los resultados concretos de la ley de justicia y paz (que permitió la desmovilización de los paramilitares y los obliga a confesar sus delitos para obtener beneficios judiciales).
El gobierno de Uribe llevó a cabo un proceso de desmovilización de las AUC que, según cifras oficiales, permitió que más de 31 mil combatientes dejaran las armas y algunos de sus jefes se acogieran a la mencionada ley.
Esa norma establece penas máximas de ocho años de cárcel, inclusive para delitos de lesa humanidad, si los paramilitares confiesan sus ilícitos y reparan los daños a los familiares de las víctimas.
El descubrimiento más reciente de las fosas en Putumayo lo realizó personal de la Fiscalía General de la Nación y la policía judicial, siguiendo pistas dadas por familiares de las víctimas, habitantes de la región y, en algunos casos, de las confesiones de los jefes de las AUC que han declarado ante la justicia, explicó Iguarán.
El funcionario indicó que la fiscalía maneja la hipótesis de que solamente en Putumayo podría haber más de 3 mil cadáveres en fosas comunes, pero advirtió que no todos corresponden a víctimas de los paramilitares, sino también de las FARC.
Por su parte, una fuente de la fiscalía aseveró a Afp que de los 105 cuerpos encontrados han sido identificados preliminarmente 25. "La mayoría son campesinos de la región", puntualizó la fuente.
El fiscal Iguarán aprovechó la conferencia de prensa para demandar más recursos para que el ente investigador pueda continuar con la tarea de búsqueda y exhumación de cadáveres, tanto de víctimas de las AUC como de las FARC.
"Todos los días encontramos nuevas fosas. Con esto no contábamos. Esto se nos ha desbordado, de ahí que necesitamos más recursos y respaldo total de la comunidad internacional", destacó el fiscal.
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