lunes, octubre 15, 2007

2 de Octubre

El Memorial del 68 será inaugurado este mes por el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente
Foto: miguel dimayuga

México, D.F., 15 de octubre (apro).- El Memorial del 68, que se está construyendo como un centro cultural y documental en las instalaciones de lo que fue la Secretaría de Relaciones Exteriores --hoy forma parte de la UNAM--, estará dedicado al movimiento estudiantil y no sólo al fatídico 2 de octubre, y presentará una filmación con cerca de 60 entrevistas con personajes de todos los sectores del país. El Memorial del 68 será inaugurado este mes por el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente.El Memorial es construido por la Dirección de Proyectos Especiales de la UNAM, y está en los últimos detalles. Como coordinador general del proyecto está el etnólogo Sergio Raúl Arroyo, quien dirigió el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y la curaduría corre a cargo de Alvaro Vázquez Mantecón. Las imágenes cinematográficas (un total de 100 horas de grabación tomadas de todos los archivos y documentos fílmicos encontrados), está bajo la supervisión y factura del cineasta Nicolás Echevarría.Todavía es temprano para que las autoridades universitarias abran el abanico de la información para este recinto, según consideran, y quieren dar la sorpresa. Pero, en términos generales, los lineamientos que el Memorial seguirá son los mismos que expuso a Proceso hace diez meses el etnólogo Arroyo, aunque ha tenido ajustes.Por ejemplo, el hecho de no dedicarlo a un día trágico sino a un movimiento generacional, se debe a que éste, por haber transformado al país en varios sentidos, se circunscribe en un ámbito mayor que debe subrayarse. Inicialmente, cuando el edificio fue entregado a la UNAM por el entonces jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, que lo permutó, puso dos condiciones: que fuera un centro cultural y un memorial al 2 de octubre.Pero, en nombre del propio movimiento, y para no traicionarlo con una visión corta y una curaduría convencional, sino utilizar los multimedia, echar mano de archivos privados, en cine y en fotografía (es decir, una especie de proyección audiovisual), y de innumerables testimonios, la UNAM busca hacer que el 68 no se vuelva patrimonio de sectas de la izquierda, pero tampoco dejarlo capturar por actitudes de derecha que quisiera olvidarlo.
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Las características del Memorial se vinculan a un eje: varias decenas de testimonios recopilados. Con base en esas casi 100 horas de material se hizo la edición museográfica. Además, desde luego, se enseñarán objetos, como en un museo.
El visitante recorrerá el Memorial en hora y media, a través de varios capítulos:
1) Empieza el 22 de julio, día del enfrentamiento entre universitarios y politécnicos reprimidos por la policía, y termina el 4 de diciembre, cuando los estudiantes pumas regresan a clases.
2) Reflexión sobre la atmósfera de los sesentas, en un momento en que el mundo está cada vez más interrelacionado. Reflexión general a los movimientos sociales, tanto nacionales como extranjeros: De liberación africana, revolución cubana, la contracultura. La implantación definitiva de la televisión, los libros (amplia circulación de editoriales extranjeras, traducciones marxistas, la literatura beat), presencia del rock y el movimiento hippie, guerra de Vietnam…
3) Luego del regreso a clases, el país está desencantado, reprimido, pero ya tuvo un momento de apertura al mundo; ya conoció la participación de la sociedad civil; se abrió el sindicalismo independiente, y se dieron por ese desencanto movimientos guerrilleros. Esas son las referencias generales. Luego vienen las reformas electorales, los movimientos de minorías, y la clase media comprende su capacidad de movilización: era una sociedad que se movía en el ámbito corporativo y se ha abierto, por ejemplo, con el surgimiento de la libertad de expresión.
4) En el discurso museográfico se mostrará que, con el 68, que fue un parteaguas, el país no volverá a ser el mismo.

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