martes, noviembre 06, 2007

Boletín Informativo ISA núm 250

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Sumario:

I. Documentan diputados perredistas la negligencia y corrupción de los gobiernos federal y estatal que llevaron a la tragedia en Tabasco.

II. En el acopio de ayuda para Tabasco, también se requieren medicamentos.

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DOCUMENTAN DIPUTADOS PERREDISTAS LA NEGLIGENCIA Y CORRUPCIÓN DE LOS GOBIERNOS FEDERAL Y ESTATAL QUE LLEVARON A LA TRAGEDIA EN TABASCO

En conferencia de prensa realizada este día, un grupo de diputados pertenecientes a la Fracción Parlamentaria del Partido de la Revolución Democrática (PRD) han dado a conocer información muy precisa que da cuenta de la responsabilidad directa que los actos de negligencia y corrupción de los gobiernos federal y del estado de Tabasco tuvieron en la vulnerabilidad en que la población de esa entidad quedó ante fenómenos naturales como las recientes lluvias e inundaciones.

El servicio de noticias ISA reproduce a continuación el texto dado a conocer en la citada rueda de prensa.

La reciente declaración de la oficina de la Estrategia Internacional de Reducción de Desastres de la ONU, y evidencias que los medios de comunicación han informado, en el sentido de que la inundación de Tabasco y la catástrofe que ha originado, pudo haberse evitado, echa por tierra las declaraciones oficiales que buscó echarle la culpa sólo a las condiciones climáticas y pone al descubierto la irresponsabilidad, negligencia y corrupción que a nivel federal y estatal generó la tragedia que ha desvastado a Tabasco.

Las autoridades oficiales sabían de las condiciones climatológicas adversas que enfrentaba el estado de Tabasco, agravadas por el cambio climático mundial. La alerta se conocía desde años atrás, ya que en 1999 se registró una situación similar, aunque menos grave a la que hoy nos aqueja. A causa de ello se destinaron cuantiosos recursos para la construcción de infraestructura hidráulica, que nunca se realizaron.

Por el contrario se permitió la construcción de fraccionamientos y conjuntos habitacionales en las cuencas de los ríos tabasqueños, así como en vasos reguladores. Por lo menos desde ese año, 1999, expertos internacionales y nacionales como el profesor Hill McGuire de la University College London, alertaba de los riesgos de inundación en Tabasco e Iván Restrepo en octubre de 1999 denuncio: “En Villahermosa, el moderno desarrollo urbano Tabasco 2000, los grandes centros comerciales, los hoteles de lujo, se afincaron en áreas que servían como vasos reguladores. Igual sucedió con la colonia Petrolera, la Valle Marino, erigida sobre una laguna. Al llegar las lluvias y no encontrar sus cauces naturales de siempre fluir hacia el mar, el agua inundó todo. También cubrió los asentamientos irregulares, los de los pobres, que tradicionalmente sufren por estar ubicados donde no deben, en las orillas de los ríos Grijalva y Carrizales”.

Aunado a las anteriores voces de alerta, debemos añadir que desde mayo de 2000, se promulgó la Ley General de Protección Civil, con el propósito fundamental de evitar que la falta de prevención de la sociedad y del gobierno produjera más daños que los propios desastres naturales, meta legislativa que por lo que se comprueba fue letra muerta para las administraciones federal y estatal, quienes desoyendo éste propósito esencial “así como evitar o disminuir los efectos del impacto destructivo de los fenómenos perturbadores sobre la vida y bienes de la población, la planta productiva, los servicios públicos y el medio ambiente”.

No hay que perder de vista que para el logro de este propósito, la Ley en la materia contempla la instauración del llamado Sistema Nacional de Protección Civil, cuya coordinación ejecutiva recae en la Secretaria de Gobernación, a la que se le otorgó, entre otras atribuciones, “instrumentar y en su caso, operar redes de detección, monitoreo, pronóstico y medición de riesgos, en coordinación con las dependencias responsables”.

La tragedia se pudo haber evitado. Pero pesó más la subordinación de la política energética a la obtención de ganancia de los productores independientes de energía. Como resultado del proceso de privatización de la electricidad el gobierno ha otorgado indiscriminadamente permisos para generar electricidad al capital privado, en contratos que garantizan la compra de esa energía por parte de Comisión Federal de Electricidad, sin importarles rebasar el margen de reserva de generación (capacidad de generación de respaldo o excedente), que conforme a estándares internacionales es de 27%. Así para favorecer la inversión privada en generación se pasó de 7.5% en 2002 a 50% en septiembre de 2007, como cínicamente lo reconoce Felipe Calderón en su Informe de gobierno.

Como es del dominio público, las plantas de generación en manos del capital privado internacional utilizan tecnología de ciclo combinado a partir del gas natural, que ha triplicado su precio de mercado, convirtiéndolas en un tipo de generación de las más costosas; por lo que, junto con la generación hidroeléctrica, este tipo de generación se despachaba para carga pico, es decir, en los horarios de mayor demanda. Por lo menos hasta 1997.

Sin embargo, a partir de 2006, la generación privada (con gas) se despacha en carga base; es decir, fija, permanente, siendo una causa importante de la elevación del costo de la electricidad, trasladando los incrementos a la población y las industrias. En otras palabras, el gobierno federal, privilegio el negocio de los productores privados modificando los regimenes de despacho diario de generación.

Como se sabe, la época de lluvias ocurre normalmente de mayo a septiembre, razón por la cual se considera que en dicho periodo las aportaciones a los embalses de las presas estarán al máximo; sin embargo, las aportaciones extraordinarias de los últimos nortes y tormentas tropicales incrementaron a niveles superiores dichos embalses, mas allá de las fechas previstas, por lo que la Secretaria de Energía debió autorizar, por lo menos un mes antes, la generación permanente con las plantas hidroeléctricas. Pero no se hizo,pues iba en perjuicio de las utilidades de los generadores privados, que según datos del Presupuesto de Egresos de la Federación de 2008, por cada peso por concepto de venta de electricidad, la CFE paga a los generadores privados 0.36 centavos. Se prefirió mantener los embalses por encima de los niveles permitidos, llevando al extremo de autorizar la apertura de las compuertas, acrecentado el riesgo de inundación de la población de Tabasco.

La tragedia de Tabasco cuestiona, de cabo a rabo, la política neoliberal en materia de prevención de riesgos y protección civil. Los resultados están a la vista, por más que Calderón simule ponerse la camiseta en repartos de despensa, controlados y dirigidos al manejo mediático de su imagen pública. Lo más terrible de la tragedia no ha pasado aun. No hay una cuantificación de perdidas humanas, pero si de una economía estatal desvastada, un ciclo agrícola roto, la infraestructura de comunicaciones colapsada, el sistema de salud pública destruido, pérdidas materiales y patrimonios familiares incuantificables, etc. Se dice, frente a la catástrofe de Tabasco, que es mayor a la tragedia de Nueva Orleans de agosto de 2005 y frente a la cual el Congreso de USA aprobó un partida de 114 mil millones de dólares para reconstruir las áreas afectadas por el huracán Katrina.

Desde la Cámara de Diputados, debe abordarse responsablemente la investigación de las causas primarias que originaron la tragedia en Tabasco, fincar responsabilidades a que haya lugar, administrativas y penales y frenar la corrupción generada en el manejo de los fondos para enfrentar los riesgos y desastres sociales. Igualmente, en la discusión del Presupuesto de Egresos de la Federación de 2008, el problema de la reconstrucción del estado de Tabasco, debe ser un tema prioritario, destinando los recursos que sean necesarios, por supuesto debidamente etiquetados, del excedente petrolero y valorar seriamente, de ser necesario, la posibilidad de plantear una suspensión temporal del pago de la deuda externa.

Por el Grupo Parlamentario del P.R.D. Dip. José Antonio Almazán González Dip. Javier Hernández Manzanares Dip. José Alfonso Suárez del Real y Aguilera Dip. Ramón Pacheco Llanes Dip. José Luís Gutiérrez Calzadilla

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EN EL ACOPIO DE AYUDA PARA TABASCO, TAMBIÉN SE REQUIEREN MEDICAMENTOS

El gobierno legítimo de México ha continuado recibiendo alimentos, agua y productos diversos con el fin de hacerlos llegar de manera segura y confiable a quienes más lo están necesitando en las zonas devastadas por las lluvias e inundaciones en el estado de Tabasco. Con ese fin, sigue activo el centro de acopio que está ubicado en la calle de San Luis Potosí 64, esquina Córdoiba, en la colonia Roma, en la Ciudad de México.

A esta labor se ha agregado ahora ele sfuerzo específico de la Secretaría de Salud del gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador para recabar también medicamentos.

La doctora Asa Cristina Laurell, titular de esta secretaría en el gobierno lopezobradorista, ha hecho llegar a la redacción del servicio de noticias ISA la siguiente lista de medicamentos que con mayor frecuencia se requieren por el riesgo de epidemias, particularmente enfermedades diarreicas, dermatosis e infecciones respiratorias.


1. AGUA INYECTABLE Intravenosa 2 ml Solución inyectable
2. ALBENDAZOL 200 mg Tabletas
3. ALBENDAZOL 20 mg / ml Suspensión oral
4. ALUMINIO Y MAGNESIO Al 185 mg , 200mg ó 447.3 mg Suspensión oral
5. AMOXICILINA / ÁCIDO CLAVULÁNICO 125 mg amoxicilina y 31.25 mg ácido
clavulánico / 5 ml Suspensión oral
6. AMPICILINA 250 mg / 5 ml Suspensión oral
7. AMPICILINA Oral 500 mg Tabletas
8. BUTILHIOSCINA 10 mg Grageas
9. BUTILHIOSCINA/METAMIZOL 10 mg / 250 mg Grageas
10. CAOLÍN Y PECTINA Oral Caolín 20g/100ml y pectina 1g/100ml Suspensión
11. CAPTOPRIL 25 mg Tabletas
12. CLORAMFENICOL 5 mg / ml Solución oftálmica
13. CLORAMFENICOL 5 mg / g Ungüento oftálmico
14. DEXTROMETORFANO 15 mg / 5 ml Jarabe
15. DICLOXACILINA Oral 500 mg Cápsulas
16. DICLOXACILINA 250 mg / 5 ml Suspensión oral
17. DIFENHIDRAMINA Oral 12.5 mg / 5 ml Jarabe
18. DIFENIDOL 25 mg Tabletas
19. ERITROMICINA 500 mg Cápsulas
20. ERITROMICINA 250 mg / 5 ml Suspensión oral
21. GLIBENCLAMIDA 5 mg Tabletas
22. HIDROCORTISONA (BUTIRATO DE) 1 mg / g Crema
23. MEBENDAZOL Oral 100 mg Tabletas
24. METAMIZOL SÓDICO (DIPIRONA) 5g / 100 ml Jarabe
25. METAMIZOL SÓDICO (DIPIRONA) 500 mg Comprimidos
26. METRONIDAZOL 250 mg / 5 ml Suspensión oral
27. METRONIDAZOL 500 mg Tabletas
28. MICONAZOL 20 mg / 1 g Crema
29. NAPROXENO 250 mg Tabletas
30. NAPROXENO 250 mg Tabletas
31. NITROFURAZONA Cutánea 2 mg / g Pomada
32. PARACETAMOL (ACETAMINOFÉN) 500 mg Tabletas
33. PARACETAMOL (ACETAMINOFÉN) 100 mg Solución oral
34. ÓXIDO DE ZINC (LASSAR) 25 g / 100 g Pasta

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