jueves, febrero 28, 2008

Barómetro Internacional

Análisis Político y Social Nacional e Internacional de Venezuela y el Resto del Mundo.

La Paz, Bolivia.

Evo Morales denuncia que embajador Goldberg encabeza la oposición a su gobierno

Por Jaime Padilla

El gobierno del presidente Evo Morales ha anunciado este lunes que elevara su denuncia ante congresistas de Estados Unidos de las acciones de la Embajada norteamericana en Bolivia, con pruebas documentadas, sobre la injerencia en asuntos internos del país a través de la Agencia para el Desarrollo Internacional (USAID).

El gobierno boliviano ha "tomado la decisión no sólo de denunciar nacional sino también internacionalmente las interferencias e injerencias de la Embajada de Estados Unidos en Bolivia a través de Usaid", dijo al respecto el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana. Adelantó que se trasladara una misión oficial a Estados Unidos para presentar a los "congresistas estadounidenses y mostrar las pruebas que tiene el gobierno respeto a esta intervención antidemocrática que viola la Convención de Viena y que convierte la cooperación en una herramienta política".

El presidente Evo Morales subrayó que "es importante defender los cambios profundos y no solamente hacer una oposición a la cabeza del Embajador de Estados Unidos. Usaid ofrece plata a las ONG, con la condición de que éstas hagan una oposición al gobierno; a los dirigentes o ex dirigentes en algunos casos".

A esta decisión del gobierno boliviano de denunciar las maniobras de la embajada norteamericana en La Paz, el canciller David Choquehuanca reiteró las acusaciones contra el embajador Philip Goldberg, de inmiscuirse en temas internos y complotar contra la administración del presidente Evo Morales. Prometió que las pruebas de la acusación contra USAID serán hechas públicas en los próximos días "comprobando el papel político" de este organismo "que opera a través de redes y organismos internacionales". Esta es la segunda oportunidad en que se acusa a al organismo estadounidense: Usaid de complotar en contra de la administración de Morales.

El gobierno afirma que cuenta con pruebas irrebatibles en sentido que la legación estadounidense apunta a dividir los sectores sociales y crear un clima de inestabilidad.

Acusa que estas maniobras están ligadas con los productores e industrias de Santa Cruz que comercializan los principales productos de la canasta familiar en el mercado interno, creando un desabastecimiento “ficticio” de principales productos alimenticios. Como respuesta el gobierno autoriza la libre importación de arroz y aceites desde la vecina argentina.
Para el Canciller David Choquehuanca sin embargo no todo fue negativo las sobre las relaciones con Estados Unidos, expresó que en el gobierno boliviano existe una buena predisposición para mejorar estas relaciones con ese país. “Será una consecuencia de una amplia discusión que el gobierno tendrá internamente y, además, de la necesidad de discutir con el propio gobierno de Estados Unidos", dijo.

"Queremos tener relaciones positivas y constructivas", expresó el canciller boliviano, David Choquehuanca, en conferencia de prensa. Anunció al mismo tiempo que el embajador Philip Goldberg ha sido convocado nuevamente ante su despacho para informar sobre las recientes denuncias que lo implican con dirigentes del movimiento campesino que no son los "legítimos representantes y que no quieren el proceso de cambio" que impulsa Morales.

Choquehuanca puntualizó que el relanzamiento de las relaciones con el gobierno y el pueblo estadounidense se tiene que forjar en base a la "transparencia y no intromisión”.

Las reprochables acciones de la embajada norteamericana.

Desde marzo de 2006, el Gobierno boliviano involucró a ciudadanos estadounidenses en varias acciones irregulares ocurridas en Bolivia.

- Entre ellas figura el atentado dinamitero a dos hoteles en la ciudad de La Paz, hecho protagonizado en marzo de 2006 por el ciudadano estadounidense Lestat Claudius de Orleans, quien recientemente fue sentenciado a 30 años de cárcel por ese acto terrorista, junto a una ciudadana paraguaya.

- El 26 de mayo de 2007, el Jefe de Estado acusó a Goldberg por entrometerse en asuntos internos porque el diplomático se había pronunciado sobre las acusaciones de presunta corrupción que enfrentaban cuatro magistrados del Tribunal Constitucional.

- Otro de los desencuentros entre el gobierno boliviano y la Embajada de Estados Unidos ocurrió cuando el 28 de junio de 2007 una ciudadana de ese país, proveniente de Miami, fue detenida a las 20.30 de ese día.

- Donna Thin intentaba ingresar por el aeropuerto de El Alto portando cinco cajas de municiones de calibre 45. Cada caja contenía, según la entonces directora ejecutiva del Servicio Nacional de Migración, Magaly Zegarra, 100 unidades de ese calibre. Sin embargo, la joven estadounidense, luego de su detención, fue dejada en libertad por el juez 6to. de Instrucción en lo Penal, Álvaro Melgarejo, bajo el argumento de no existir imputación alguna en contra de ella.

- Asimismo está la fotografía que difundió el ministro de Gobierno, Alfredo Rada, en la que el embajador Goldberg aparece junto al colombiano John Jairo Banegas, relacionado a una banda de asaltantes, hoy detenido en la cárcel de Palmasola, Santa Cruz.

- A esto se suma la reciente denuncia del becario estadounidense y estudiante de Fulbright, John Alexander Van Schaick, quien acusó al asistente de seguridad de la Embajada de EEUU en Bolivia, Vincent Cooper, de haberle pedido que espiara a ciudadanos venezolanos y cubanos. Por este hecho, el embajador Goldberg compareció ante la Cancillería y ante el Ministerio de Gobierno.

- En el encuentro se resolvió que Cooper, quien además fue declarado por el Jefe de Estado boliviano como "persona no deseable", no retornará al país y será interrogado por el Departamento de Estado.

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8 de marzo Día Internacional de la Mujer.

El derecho de la mujer a la igualdad en la sociedad

Por Sylvia Ubal

La imagen, de dos mujeres del pueblo somalí En la mitad del siglo XIX surgen dos fenómenos trascendentales que habrían de dar a las mujeres una agenda de lucha y que llevaron adelante las primeras acciones de mujeres trabajadoras organizadas contra la explotación capitalista

La Revolución de 1848 y la Convención por los Derechos Civiles en 1857 en Estados Unidos, en que las mujeres, definitivamente solicitaron su acceso a la ciudadanía. Y era una época en que cada vez mas mujeres se incorporaban a la producción especialmente en la rama textil. Una gran marcha de trabajadoras marcharon entre los barrios de las familias adineradas de Nueva York en protesta por las inhumanas condiciones de trabajo las manifestantes fueron atacadas por la policía.

Alrededor del 8 de marzo de 1908 140.000 costureras industriales se declararon en huelga demandando el derecho de unirse a los sindicatos, mejoras salariales, una jornada de trabajo de menos de 12 horas, entrenamiento vocacional. Durante la huelga, 129 trabajadoras murieron quemadas en un incendio provocado por el patrón en la fábrica Cotton Textile Factory, en Washington Square, Nueva York las habían encerrado para forzarlas a permanecer en el trabajo y no unirse a la huelga, y en 1910 durante la Segunda Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, a raíz de este hecho y en homenaje a este grupo de trabajadoras se propone el 8 de marzo Día Internacional de la Mujer.

El acuerdo señala que se dedicará un día especial a las mujeres para promover el sufragio entre las obreras como parte central de una lista de otras reivindicaciones. Clara Zetkin y Rosa Luxemburgo en 1915 fueron las promotoras de la Primera Conferencia Internacional por la Paz, en Holanda, estas mujeres alemanas quienes advirtieron, en su propia tierra, cómo el militarismo condena al mundo a desaparecer. Ellas llamaron a la construcción de una organización internacional. En esa época se crearon círculos de reflexión donde se hablaba de las desgracias del matrimonio, de los derechos sexuales y de la organización de las prostitutas.
En Estados Unidos y en Gran Bretaña había surgido el orgullo femenino de participar en el ámbito público a través del voto ciudadano; las mujeres reclamaron sus derechos sociales, su derecho a la tierra y, también, su libre albedrío como ciudadanas en materia administrativa, económica y educativa.

En Chicago, las feministas socialistas realizaron una jornada en el teatro Garrick para hacer campaña por el sufragio femenino y contra la esclavitud sexual.

Hoy existe la convicción, de que antes del triunfo de la Revolución de 1917 en Rusia, las trabajadoras realizaron una movilización por el sufragio y una huelga inmensa, a la que se unieron miles y miles de mujeres, considerada en la historia como la marcha de las 20 mil, esto sucedió en marzo, lo que vendría a ser el antecedente definitivo que puso la fecha para la lucha de las mujeres.

La mujer sigue en los siglos XX y XXI defendiendo sus derechos.

En estas más de nueve décadas en que ha transcurrido el siglo XX y comenzó el siglo XXI, las mujeres de todo el mundo hemos conseguido a fuerza y tesón, organización, conocimiento, y decisión y desde que en Dinamarca o Chicago se llamó a las obreras socialistas a luchar por sus derechos y a celebrar mundialmente cada año una jornada reivindicativa, el 8 de marzo se constituyó como la fecha emblemática que reúne la vieja lucha igualitaria por los derechos políticos y sociales de las mujeres y el reconocimiento de esos derechos.

El reconocimiento mundial a nuestros derechos humanos, que incluyen una nueva visión de la violencia privada y pública contra las mujeres y ha dado lugar a leyes y programas contra la violencia.

La libertad del cuerpo, los derechos sexuales y reproductivos. Este reconocimiento fue ratificado por 184 gobiernos en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) durante la Conferencia Mundial de Población y Desarrollo, en El Cairo, Egipto en 1994. En muchos países es legal el aborto, en otros está despenalizado, pero nuestros cuerpos todavía son emblemas pornográficos.

Al comienzo del tercer milenio, las mujeres estamos dispuestas a consolidar nuestra ciudadanía plena, es decir a reivindicar nuestro derecho indiscutible a intervenir, con todas las garantías, en el ámbito público, en el gobierno y en la sociedad.

No obstante, es necesario reconocer que todavía, las mujeres somos las más pobres entre los pobres. Cerca de mil millones de mujeres en el mundo vivimos bajo la línea de pobreza extrema; aún no es paritaria la educación inicial y profesional entre hombres y mujeres.

A medida que el feminismo ha ido cobrando fuerza en todo el mundo, el Día Internacional de la Mujer ha ido perdiendo su carácter obrero, pasando a ser una jornada de lucha en la que se reclaman los derechos de todas las mujeres en todos los ámbitos. Año tras año, miles de mujeres salen a las calles de todo el mundo para demandar nuevos derechos, defender los ya conquistados y luchar contra aquellas leyes que las discriminen o que rechacen el principio de igualdad de sexos y de oportunidades.

El 8 de marzo Día Internacional de la Mujer, se celebra en todo el mundo. Mujeres y hombres que trabajan por las causas de las mujeres, conmemoran los esfuerzos que ellas han realizado por alcanzar la igualdad, la justicia, la paz y el desarrollo. Mas allá de las fronteras y diferencias étnicas, lingüísticas, culturales, económicas y políticas, las mujeres de los cinco continentes organizan diversos eventos para festejar este día.

El objetivo de la ONU al declarar el 8 de marzo como Día Internacional de la Mujer es unir esfuerzos para poner fin a la discriminación por motivos de genero, cuando y donde quiera que esta ocurra. Es preciso que toda la humanidad tenga plenas facultades para aportar su contribución al desarrollo de la sociedad y el adelanto de la civilización.

Por ello, debemos de luchar por nuestros derechos específicos -porque la ley reconoce a la igualdad-, es necesario abordar el 8 de marzo como la única y más importante jornada mundial de reflexión, de lucha y demanda de los derechos de las mujeres, y que debemos de informar sobre todo conocer nuestros derechos.

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¿Un momento coyuntural?.

El delgado filo de la navaja

Por Domingo Rodríguez

Los procesos de cambio en las sociedades han sido estudiados y comparados durante por lo menos un siglo, por distintos escritores y pensadores y con distintas visiones. Los cambios bruscos que producen modificaciones profundas en la estructura del poder en las sociedades, han sido llamados revoluciones.

Uno de los trabajos más esclarecedores respecto de este proceso fue la investigación desarrollada por el sociólogo canadiense Crane Brinton, plasmada en un libro titulado “Anatomía de la revolución”. A partir del análisis comparado de cuatro grandes procesos revolucionarios en la historia de nuestra Cultura Occidental y partiendo de que cada proceso social es diferente -con distintas características y fuerzas interactuantes- el estudio buscó características comunes que permitieran entender el fenómeno “revolución”.

La parte más importante de las conclusiones de esta investigación está referida a la forma en que el poder fluctúa en una sociedad en condiciones revolucionarias. Toda revolución es el producto de una explosión carentemente “espontánea” por parte de las mayorías oprimidas por las elites dominantes. En un primer momento estas mayorías toman para sí el poder y producen un derrumbamiento de las estructuras sociales que permitían la situación anterior. Los hombres y mujeres comunes se vuelven protagonistas de la historia, asumiendo por sí mismos su destino. Sin embargo esta situación parece ser de un equilibrio inestable. En una revolución triunfante aparecen inmediatamente grupos sociales (que podían ya existir, oponiéndose al poder establecido, o pueden irse formando en el propio proceso) que van convirtiéndose en los “ejercedores” del poder social.

Una vez que la revolución ha triunfado, se producen luchas internas por hacerse del poder, que generalmente terminan en la consolidación de un nuevo estamento que se hace cargo del manejo de la sociedad. Poco a poco o bruscamente el ejercicio de la “democracia de todos” producido por la explosión social va perdiendo impulso y el resultado final es la aparición de una nueva “clase social” que sustituye a la dominante en el anterior sistema. La revolución se institucionaliza y reprime toda tendencia a proseguir los cambios que habían esperanzado a las grandes mayorías. Un claro ejemplo de este fenómeno se ve en la revolución mexicana, que termina con el absoluto dominio del PRI (el partido “institucional” de la revolución). La horizontalidad en el ejercicio del poder lograda al principio se convierte en una nueva verticalidad, aparecen los síntomas de sectarismo, de ejercicio autoritario, de exclusión y “purificación” de los nuevos estratos dirigentes. Las purgas stalinistas que empezaron a partir de los “Juicios de Moscú” son el ejemplo extremo de esta situación.

Desde el propio comienzo de los procesos de lucha social en el siglo XIX esta situación fue clara para algunos individuos. En la Primera Internacional, Mihail Bakunin, enfrentándose con Carl Marx, explicaba que proponer la “dictadura del proletariado” significaba generar una “dictadura de algunos proletarios” y que esto promovería la creación de una nueva clase social que se institucionalizaría y burocratizaría, deteniendo –y hasta anulando- el proceso revolucionario (estaba intuyendo la situación que se daría un siglo después en la Unión Soviética). También León Trotzky en su enfrentamiento con ideológico con Joseph Stalin, propuso la “revolución permanente” como una forma de evitar esa cristalización de la revolución. En la década de los 60 del siglo pasado, Régis Debray, afirmando las posiciones de Ernesto Guevara, habló de la “revolución en la revolución” como forma de seguir adelante en la búsqueda de una nueva sociedad.

Pero como la historia es un sistema abierto, no determinista, que se va generando a partir del estado de cada sistema y a las diferentes fuerzas que en él interaccionan, sin regirse por leyes absolutas (las cuales hoy no existen hoy ni en la física); este proceso de cristalización no tiene porque ser inevitable. Un ejemplo de ello parecen ser los últimos acontecimientos de la Revolución Cubana, que aparentan mostrarnos un proceso social que se mantiene dispuesto a conservar en su seno el impulso de cambios para seguir mejorándose.

Todo proceso revolucionario parece encontrarse siempre en el delgado filo de una navaja, arriesgándose en su transcurrir a perder el equilibrio y caer hacia su cristalización o peor aún, hacia el retroceso. La Revolución Francesa que tumbó a la monarquía absolutista terminó en el Imperio de Napoleón Bonaparte. Nuestro proceso bolivariano no está exceptuado de esta tensión.

¿Nos mantenemos en el filo de la navaja?.

La pérdida del equilibrio de los procesos revolucionarios no parece estar generada exclusivamente por los factores externos, desde dentro surgen los factores más importantes que conducen hacia su cristalización. Es posible que los factores externos colaboren, pero generalmente sirven sobre todo para justificar internamente la progresiva pérdida de poder colectivo y la verticalización del poder en la revolución. El cerco de las potencias europeas le fue útil a Stalin para consolidar su férreo poder absolutista en la sociedad soviética, el expansionismo alemán estuvo siempre presente en el discurso de los sucesivos conductores de la Revolución Francesa.

En el proceso bolivariano parecen aparecer síntomas de estos factores internos, analicemos algunos de ellos.

A diferencia de las revoluciones analizadas por Brinton en las que el movimiento revolucionario sacude y destruye el aparato estatal existente, en Venezuela los cambios surgen de un movimiento social que se hace cargo del mismo. Este estado heredado tiene un alto grado de burocratización y corrupción que lo califica como un sistema ideal para mantener e impulsar la contrarrevolución. Y no sólo por la explicación superficial de que el grueso de los funcionarios vienen del sistema anterior, sino porque existen leyes, procedimientos, costumbres y formas de hacer las cosas que no ha sido posible modificar significativamente en los nueve años de proceso bolivariano.

Con respecto al grado de burocracia, un solo ejemplo puede ser paradigmático de algo que se repite con distintos matices en todas las instituciones públicas. En el Centro Simón Bolívar, el expediente que acompaña cada cheque de pago emitido (y se emiten miles mensualmente) tiene un espesor de 40 a 50 folios. Cada vez que un proveedor tiene que retirar un cheque de pago, debe adjuntar nuevamente un paquete de solvencias, el mismo para cada pago, a fin de alimentar ese expediente.

Las Misiones fueron una respuesta provisional ante esta rigidez burocrática, pero una de las razones por las que han ido perdiendo su efectividad es que se han ido burocratizando (y corrompiendo) progresivamente en la medida que se han ido institucionalizando. El by pass que representaron al rodear la estructura establecida va perdiendo efecto al irse integrando a ella.

El factor de la corrupción sigue estando omnipresente en toda la estructura del estado. La comisión para el funcionario que “facilita” los trámites es de rigor en la mayoría de las instituciones públicas. Si bien es cierto que la corrupción no es un problema de gobierno, sino que es una pauta cultural que ha venido desarrollándose en nuestra sociedad desde hace más de medio siglo, así como también es cierto que las pautas culturales necesitan un tiempo mayor al de uno o dos períodos de gobierno para ser modificadas, sin embargo sí es posible generar una política anticorrupción que comience a moderar sus efectos atacando su impunidad. Recordemos como ejemplo en Cuba el fusilamiento del general Ortega (héroe de la revolución) al probarse su relación con el tráfico de drogas.

La impunidad es la gasolina que le permite a la corrupción mantenerse y crecer. El gobierno bolivariano no parece haber podido desarrollar una política efectiva para combatirla. Si bien parece ser real que se han destituido funcionarios y algunos de ellos han terminado en la cárcel, el silencio público de estos hechos no ha permitido desarrollar una matriz de opinión que combata la percepción de impunidad. Es posible que esto esté relacionado con las dificultades que el proceso bolivariano ha tenido en generar una política comunicacional efectiva, o puede que existan además otros agentes internos que no son del dominio general para explicar estas dificultades.

Estos dos factores, la burocracia y la corrupción son un excelente caldo de cultivo para la formación de una nueva clase social que está acaparando el poder desde la estructura del estado, desarrollando también un poder económico paralelo. Algunos analistas serios, que apoyan al proceso bolivariano (tanto en el exterior como en el sector interno, entre los que podemos nombrar a Eleazar Díaz Rangel o a Javier Biardeau) están hablando del nacimiento de una nueva “boliburguesía”.

No nos atrevemos a afirmar que esto ha acontecido, pero algunos síntomas son preocupantes. El PSUV (Partido Socialista Unido de Venezuela) parece ser la respuesta a la necesidad de constituir una institución social y política que permita el ejercicio del poder de las grandes mayorías. Sin embargo el que el 78% de los delegados a su congreso fundacional sean ex integrantes del MVR (Movimiento Quinta República) no parece colaborar demasiado en este objetivo. Igualmente significativa es la forma en que se ha empezado a manejar el poder dentro de un partido en constitución, con una dirección provisional nombrada desde la cima, que se inaugura respondiendo a las denuncias del diputado Tascón con una respuesta singularmente represiva, sin permitir el derecho a la defensa (aunque parece tender a rectificarse). Quedando claro que no estamos tomando partido por esas denuncias, sino que analizamos la forma en que han sido manejadas como representativa.

Del mismo modo, los cambios evidentes en el estilo de vida de muchos de los funcionarios públicos, con una ostentación de vestimentas y vehículos de alto lujo, grupos de guardaespaldas que van más allá de la seguridad necesaria, así como su progresivo alejamiento del contacto con las gentes, van configurando una sintomatología que aspiramos no sea determinante.

La forma en que el aparato de gobierno parece no contar con los cuadros de recambio necesarios se trasluce en los sucesivos “enroques” que se han repetido en los últimos tiempos. Es posible que tenga que ver con el alejamiento progresivo del gobierno de todo aquel que no represente un “cuadro incondicional”, lo que promueve también la formación de un grupo “selecto“de dirigentes.

Luego de los resultados del referéndum del dos de diciembre de 2007, el presidente Chávez ha propuesto las tres erres (revisión, rectificación y reimpulso) para combatir la evidente pérdida de votantes. Parece ser el camino correcto, sin embargo las dos últimas erres dependen sustancialmente de resolver la primera. Un proceso de revisión debe partir de una seria autocrítica, de la determinación cruda de los posibles errores cometidos y de la asunción de los mismos como base de una nueva conducta acertada. Hasta el presente, las tres erres parecen haberse asumido desde un mero punto de vista formal, las conductas anteriores se están repitiendo y no se hace evidente un cambio significativo (un golpe de timón) en la dirección del proceso.

El futuro está abierto.

Con estas consideraciones no estamos planteando un panorama apocalíptico, las reflexiones precedentes (que pueden estar equivocadas) son sobre todo un llamado a tener en cuenta de que los peligros para el proceso bolivariano no están sólo en los enemigos externos, sino que pueden encontrarse en su propio seno.

Si somos capaces de asumirlos y tomar decisiones y actitudes que los hagan retroceder, seguiremos creando una nueva alternativa para nuestra sociedad. La única manera de poder lograrlo es manteniendo abierta la posibilidad de la discusión y la inclusión de las opiniones y visiones diferentes que enriquezcan el proceso y tomando decisiones creativas, que generen cambios en el rumbo actual.

El peligro mayor de perder el equilibrio en el filo de la navaja está siempre presente en un proceso de cambios. Queremos colaborar en mantenerlo, aún a riesgo de que alguien nos pueda tildar de traidores. Este es un riesgo que quienes creemos profundamente en que el mundo puede cambiar y que están en nuestras manos lograrlo, estamos siempre dispuestos a asumir.

En el exterior nuestro país es considerado una “narcodemocracia”.

El secuestro una práctica heredada de la colonia

Por José Eulícer Mosquera Rentería.

Fue el secuestro la estrategia principal utilizada por los colonialistas europeos para desarraigar a nuestras ancestros de su madre África para traerlas a América esclavizadas y como su fuerza de trabajo fundamental para producir las riquezas que llevaron a la consolidación como grandes potencias a varias naciones europeas, manteniéndolas atadas a cadenas, sometiéndolas al trabajo forzado y a los más crueles castigos en estas tierras inhóspitas y desconocidas para ellas, y sin derecho a hablar sus lenguas, a practicar sus culturas, ni a tener algo tan importante como la institución de la familia, por más de tres siglos y medio.

Venimos afirmando que el colonialismo en nuestro país no se terminó con la expulsión de los opresores ibéricos entre 1.810 y 1.824. Pues el poder político-económico quedó en manos de sus más cercanos descendientes, igual de ambiciosos, egoístas y miserables como ellos, quienes para acceder o retener el poder han mantenido algunas de sus abominables prácticas esclavistas, como el secuestro, el racismo y la discriminación étnica, el desplazamiento forzado, el abuso del poder, las ejecuciones extrajudiciales, la falta de respeto por la vida ajena y la dignidad humana, a pesar de que dicen ser los más cristianos o los portadores de las ideologías más comprometidas con las causas sociales. Deplorablemente, grupos que se plantean como objetivo fundamental el cambio político-social en favor del pueblo, también han caído en estas abominables prácticas.

Los recientes testimonios de los secuestrados y confesiones de los vinculados al paranarcotráfico ofrecen una idea de lo que tuvieron que sufrir nuestras tatarabuelas africanas esclavizadas durante más de 350 años, de los traumas, la pobreza y la marginalidad social heredados por sus descendientes, y lo justo de las reclamaciones de resarcimiento y/o compensaciones presentadas por las comunidades afro colombianas a través de sus organizaciones ante el Estado Colombiano, el Estado Español y demás potencias beneficiadas con la trata negrera y con estos dos últimos siglos de superexplotación neocolonialista y semicolonialista.

Lo más grave es que en estas practicas abominables han venido involucrados altos representantes de las clases gobernantes y de las instituciones estatales – sobretodo de la fuerza pública y organismos de seguridad – muchos de ellos hoy asociados al narcoparamilitarismo, por lo cual últimamente en el exterior nuestro país es considerado una “narcodemocracia” que no respeta los derechos humanos, y el Estado Colombiano ha sido condenado muchas veces por instancias nacionales e internacionales por su complicidad en magnicidios, desplazamientos forzados, desapariciones, genocidios, etnocidios, torturas, ejecuciones extrajudiciales y crímenes de lesa humanidad.

Y para mayor gravedad del asunto, nuestros gobiernos son aliados incondicionales del Estado más terrorista y criminal del mundo, como son los Estados Unidos de América, que cuando se les antoja invaden países asesinando masivamente a sus habitantes, descargando sobre ellos todo su poderío bélico-militar, llevándose secuestrados a sus adversarios o a los adversarios de sus amigos e idiotas útiles, manteniéndolos en cárceles clandestinas amarrados con cadenas y sometidos a todo tipo de torturas y humillaciones degradantes de la condición humana. Por lo cual no tienen autoridad alguna para juzgar a nadie.

En el caso particular de las comunidades afro colombianas del Chocó y del Pacífico parece que la “política de seguridad democrática” del presidente Álvaro Uribe Vélez no las cobijara, ya que durante todo su mandato se ha intensificado la presencia de los grupos armados y narcoparamilitares en sus territorios, imponiéndoles toda una espiral de crímenes, terror, humillaciones, indignidad, y desplazamiento forzado.

En Buenaventura por ejemplo el año pasado estos grupos realizaron alrededor de 500 asesinatos y provocaron miles de desplazamientos forzados, e igualmente en Istmina y la región del San Juan, Chocó, en el ultimo año están realizando entre seis y diez asesinatos semanales, decenas de desplazamientos forzados, rompiéndoles su tradición de pueblos pacíficos y alegres, y profundizando su estado de pobreza y marginalidad social.

Por tanto compartimos con quienes consideran que no es hora de continuar con inamovibles y chapuliando aguas sucias los unos contra los otros. Se trata de recuperar la libertad y la dignidad para un grupo de compatriotas y la tranquilidad para sus familias, mediante un acuerdo humanitario, al cual debe seguir la iniciación de un proceso de paz, que tenga como soporte la justicia social y el respeto a los derechos humanos, para que lo mas temprano posible logremos los colombianos ser felices en nuestro bello y privilegiado país.

Para avanzar en estos procesos hay que empezar por reconocerle estatus político a los grupos insurgentes, ya que estos a pesar de sus graves equivocaciones, quizás producto de la prolongación de esta fase del conflicto, que ya lleva unos 60 años, siempre han tenido una propuesta política de búsqueda de cambios estructurales en el país y han justificado su postura ante la actitud egoísta, criminal y genocida de las elites dominantes, que han tendido a eliminar a sangre y fuego a sus contradictores y de una justicia que las ha cubierto de impunidad. Entre otras cosas, las FARC nacieron de las guerrillas liberales creadas por los grandes dirigentes de las oligarquías gobernantes, como instrumentos para dirimir sus conflictos de intereses político-económicos.

Propiciar estos procesos se hace aun más urgente si tenemos en cuenta que nos encontramos bajo varias paradojas bien elocuentes. En primer lugar y como ya dijimos, la insurgencia actual cumple cerca de 60 años de existencia y no ha podido ser derrotada por los diferentes gobiernos republicanos, aun contando con la asesoría y ayudas financieras y técnico-militares de los Estados Unidos.

En segundo lugar, el actual gobierno al iniciar su primer periodo afirmó que en nuestro país existían 12.000 paramilitares -que son ejércitos de las nuevas oligarquías que emergieron en los años de 1.970 alrededor del negocio del narcotráfico y se fundieron con los sectores más inescrupulosos de las oligarquías tradicionales- pero posteriormente ha afirmado que se han desmovilizado 25.000. En tercer lugar, dijo que existían 20.600 guerrilleros, que en menos de seis meses los habría derrotado, pero últimamente ha afirmado que ha capturado 27.290, ha producido 9.841 bajas y se han desmovilizado 13.333.

Es decir, supuestamente han salido de circulación más de 50.000 guerrilleros, 250% de los efectivos registrados inicialmente. Sin embargo sigue siendo tema fundamental para justificar la “política de seguridad democrática”, “el combate contra la insurgencia” y para ello ha aumentado la tropa oficial de 120.000 a 210.000 efectivos, en esta misma dirección aumentando el presupuesto militar en forma astronómica, en detrimento de la inversión social.

Mientras públicamente desconoce la existencia de un conflicto interno, para negarle reconocimiento político a la insurgencia, por otra parte su bancada uribista presenta proyecto de ley para reconocerle estatus político a los paranarcos y limpiarlos de sus graves delitos contra la constitución y la ley, y de sus tantos crímenes de lesa humanidad.

Es decir, los colombianos no podemos continuar sumergidos en tanta incongruencia en tanto desgaste, en un desangre tan irracional e injustificable y en este estado de sufrimiento e infelicidad general.

De allí que compartamos las afirmaciones y propuestas del presidente de la hermana Republica Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez Frías, ya que si queremos llegar a soluciones reales tenemos que empezar por reconocer nuestra cruda realidad. Él como persona que ha demostrado su interés en ayudarnos a resolver el conflicto interno y a lograr una paz duradera, está obligado a hacer una interpretación adecuada de nuestra realidad, y si se ha referido con dureza al presidente Álvaro Uribe Vélez, es porque este después de invitarlo a mediar en aras de lograr un acuerdo humanitario, como antesala para avanzar hacia un proceso de paz, luego lo sacó en forma grosera y desobligante, sin tomar en consideración su condición de jefe de un estado hermano al cual nos ligan profundos lazos históricos, lo más seguro atendiendo directrices del Gobierno USA.

En este sentido no compartimos las posturas de algunos compatriotas de la oposición y de la izquierda colombianas que en los últimos días parece que se han dejado manipular por los grandes medios de información uribistas y se han dedicado a lanzar condenas y ataques contra Chávez y la Honorable Senadora Piedad Córdoba. Hay que ser cuidadosos en esto, ya que el proceso que orienta Chávez en la hermana República Bolivariana de Venezuela revive los proyectos esperanzadores de los pueblos latinoamericanos en unas democracias verdaderamente participativas, soportadas en la justicia social, los cuales han sido truncados a sangre y fuego por oligarquías nacionales egoístas en contubernio con los Estados Unidos de América. Por principios las fuerzas democráticas, revolucionarias y progresistas no podemos prestarnos para un nuevo zarpazo del Gran Imperio sobre parte alguna de nuestros pueblos, al contrario estamos llamados a cerrar filas alrededor de los procesos autónomos que en estos momentos avanzan en nuestra región, tales como los de Brasil, Ecuador y Venezuela.

La necesidad de avanzar en las áreas de alimentación, salud y seguridad son los principales retos del 2008.

Los cambios necesarios en la revolucion bolivariana

Por Diego Olivera

La profundización de un proceso de rectificación, anunciadas por el presidente Hugo Chávez, en sus distintas intervenciones públicas, apuntan a resolver grandes problemas, en áreas sensibles de la sociedad venezolana. Luego de importantes avances en materia económica y política, en el crecimiento de la infraestructura, han quedado pendientes temas urgentes, como el abastecimiento alimentario, la salud y la seguridad personal, los que ameritan un gran esfuerzo, existen planes concretos para enfrentarlos, elaborados por el ejecutivo nacional para alcanzarlos, las autoridades nacionales y regionales, deberán rectificar su gestiones de gobierno.

Las propuestas y planes deben concretarse no solo a corto plazo, debe existir una continuidad, el proceso bolivariano necesita avanzar en los temas principales de la sociedad venezolana, son tareas impostergables, que no pueden ser aplazadas por una mala administración pública, existen los recursos y la voluntad presidencial. Pero si muchos dirigentes y funcionarios administrativos, no rectifican sus gestiones, acuden a la retórica para defender sus falencias, este momento histórico en la defensa de la revolución bolivariana, no da cabida al discurso, es el momento de la acción y la concreción, de llevar adelante lo planes integrales sociales, para crear las bases del modelo socialista humanista.

La necesidad de visualizar los avances alcanzados en el proceso bolivariano.

Nos parece importante analizar, los importantes logros alcanzados en nueve años del gobierno bolivariano, porque las criticas de los sectores opositores, han llevado una campaña de desinformación, a través de los medios de prensa privados nacionales y extranjeros.

1. Las ganancias petroleras para la inversión y para avances sociales, el punto de definición es hacia dónde se debe dirigir la riqueza que genera la explotación de hidrocarburo: a beneficiar a un grupo de accionistas de una compañía particular, o a financiar necesidades del crecimiento en un país en desarrollo, como es el caso de las naciones latinoamericanas productoras de crudo. El uso del petróleo como herramienta de intercambio, en un proceso de negociaciones económicas, ventajosas para Venezuela y los países latinoamericanos, ya sea miembros del ALBA, CARICOM, MERCOSUR u otras naciones que necesitan este recurso energético, no para regalar como dicen los grupos opositores, pero si en negociaciones que van desde lo monetario, hasta el intercambio de mercadería o servicios.

2. El presidente Chávez manifestó que “el aumento del consumo per cápita de alimentos en la población venezolana, y la disminución de la pobreza extrema gracias a las políticas aplicadas por el Gobierno Bolivariano para mejorar la calidad de vida de los venezolanos. Algunos indicadores de CEPAL muestran los avances económicos, donde se señala: “se registro un crecimiento en 2004 del 17% (uno de los más altos del mundo según el FMI) al cierre de 2005 de un 9,4% del Producto Interno Bruto, y un crecimiento del 10,3% para el 2006. En abril de 2007, según datos oficiales. La tasa de desocupación de diciembre de 2005 8,9% disminuyó 2 puntos porcentuales con relación a diciembre 2004 10,9%, y en el 2006 quedó en 8,5%. Las reservas internacionales alcanzaron los 37.299 millones de dólares.

3. El tema salarial sostuvo un incremento anual, en el período 2007-2009, así el incremento del Salario Mínimo Nacional, que pasó de Bs. 512.325,00 a Bs. 614.790,00 registró en el segundo trimestre de 2007 el mayor incremento salarial 10,3% un incremento salarial de 17,0% a partir del 1° de marzo, a objeto de compensar el retardo de la discusión de contratación colectiva vencida en mayo de 2006. Actualmente el salario mínimo esta en 293 dólares y un bono alimentario por cada día de trabajo, que alcanza en 24 días a 157 dólares.

La necesidad de desarrollar los planes de alimentación, salud y seguridad se conciben de alta prioridad.

El tema alimentario.

La necesidad de elevar el consumo de alimentos se ha mantenido en alza en el 2007 aumentó 12%, a pesar de los faltantes de anaquel de algunos rubros básicos que se vivieron recientemente. El consumo de bienes y servicios de los venezolanos crecerá alrededor de 8% en los estratos D y E que representan una amplia mayoría del sector consumidor.

En el 2007 se produjeron mil 704 millones de litros de leche. También se ha levantando la producción de carne cerca del 20%. De la venta en las Bahamas de unos depósitos petroleros que tenía PDVSA en esa isla, se invertirán 300 millones, que irán al Fondo Nacional de Producción Lechera (Fonaprolec), destinado a "incrementar en el más corto plazo" la producción láctea.

Hay factores objetivos de distribución en el rubro de alimentos, pero también existen el acaparamiento, con el objetivo de desviar la mercaderías, muchas veces para el contrabando hacia Colombia, otros caminos son la redes de venta informal (muchos buhoneros “vendedores informales”), venden a sobre precio alimentos de la canasta básica, también la especulación para aumentar los precios, genera acaparamientos de los productos básicos.

La inversión en la atención hospitalaria.

La necesidad de mejorar la red hospitalaria, esta en los planes del gobierno venezolano, sobre este tema el presidente Chávez, ha manifestado que “considera que aún son pocos los recursos ordinarios destinados a la salud”. "Estimo que pronto debemos llegar a 9% del PIB, destinado a la salud para todo el pueblo venezolano, es un compromiso ineludible de la revolución, tendrá atención de salud de primera calidad".

El presidente Hugo Chávez confesó que "ahora sí" tiene "el rumbo claro" en materia de salud "y cuando uno tiene el rumbo claro es hora de acelerar la marcha y de recuperar el tiempo perdido". En ese sentido no sólo anunció recursos extraordinarios para el Sistema Metropolitano de Salud, sino que informó, que propone destinar un dólar por cada barril de petróleo, que será orientado hacia ese sector.

También agrego que “un dólar por cada barril que produzcamos serían 3 millones de dólares por día, si lo multiplicamos por 365 nos da 1.095 millones de dólares, esto es igual a un poco más de dos billones de bolívares o dos mil millones de BsF", calculó, para luego pedirle al vicepresidente ejecutivo, Ramón Carrizález, y al ministro de Energía y presidente de Petróleos de Venezuela (PDVSA), Rafael Ramírez, "tomar nota" de su propuesta y presentarle el estudio”.
Además reconoció que “durante varios años estuvimos con un plan (de salud) por aquí, otro por allá. Desconocimiento muchas veces, avances, retroceso, avanzando en zigzag, productos de muchas cosas. Después de todas las experiencias y las batallas dadas puedo decir que hemos tomado la punta del ovillo".

El Presidente informó además que “de los dividendos de la Cantv, estimados en un millardo de bolívares fuertes, 100 millones serán orientados a asignaciones especiales para el proyecto”. Puntualizó que “al plan fueron destinados 259 millones para la primera etapa. Eso cubre el primer trimestre. 30% de lo necesario, así que nos hace falta 60%, que lo iremos agregando por parte".

El plan de seguridad piloto en Caracas.

El Distrito Metropolitano de Caracas está celebrando los buenos resultados del periodo piloto de implementación del Plan de Seguridad Ciudadana, la comparación con el restante del país revela que los dos primeros puntos del Plan, la prevención y el efectivo control de delitos, han aliviado la Gran Caracas de la intensa ocurrencia de los principales crímenes que afectan a Venezuela, como los secuestros, no computados en los últimos días en la capital y ciudades vecinas.

En virtud de la gran concentración poblacional de Caracas y alrededores, las cifras de 19 casos homicidios, en comparación con los 123 a nivel nacional, y 21 casos de violencia a la mujer, en comparación a los 160 ocurridos nacionalmente, muestran un cambio en pocos días, el Plan ha logrado contener el volumen de delitos en esta región de Venezuela.

El éxito en obtener estos números parece residir en el tercer eje del Plan: la atención ciudadana. Este punto determina que sólo se obtiene la seguridad si la comunidad está involucrada, realizando denuncias, siendo educada para la ciudadanía y recibiendo atención en áreas como salud, cultura y empleo.

El Plan de Seguridad ha empezado haciendo contactos con organizaciones de base como asociaciones de vecinos y grupos culturales en municipios como Libertador y Sucre. Aun en términos educativos, se ha programado dos talleres sobre violencia intrafamiliar y justicia de paz. A través de estos encuentros, de los cuales han tomado parte activamente 236 representantes de la sociedad civil. Se han elaborado cinco diagnósticos sociales, organizacionales y delictivos de cada sector, a fin de hacer la detección de zonas vulnerables del distrito caraqueño.

Los esfuerzos en fortalecer estas áreas conllevan a un cambio de actitud en las instituciones.
La necesidad de este análisis comparativo, tiene como objetivo central, señalar los importantes avances del proceso bolivariano, como reflejar las constantes propuestas y planes del presidente Chávez, en materia de soluciones económicas, políticas y sociales. Pero también reflejar la inoperancia, de muchos sectores políticos nacionales y regionales, lo que ha derivado en la desarticulación e inanición de temas, como el desabastecimiento, la inseguridad ciudadana y la red hospitalaria.

Los objetivos de la revolución bolivariana, han tenido como eje el pueblo y la sociedad venezolana, lograr elevar los niveles de vida, asegurar trabajo, son prioridades elementales, para un modelo socialista de vida. Los dirigentes y funcionarios públicos, deben jugar un papel de servidores públicos, no albaceas de los fondos del estado, para proyectos económicos, sociales, de acuerdo a sus intereses políticos o económicos.

La rectificación propuesta por el presidente Chávez, no debe verse como un discurso, se debe asumir como un cambio radical de trabajo, se han postergado muchas obras, se han dejado de lado el control de la seguridad en las ciudades. No se ha controlado el funcionamiento de las instituciones, dejando muchas veces en manos de la burocracia, la atención al pueblo, generando con esto mala atención y ausencia de respuesta a miles de usuarios.

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