viernes, junio 06, 2008

El país que más engaña a sus ciudadanos

Hace cuatro años mínimamente, alrededor del 80% de la población mundial sabía que el gobierno de los Estados Unidos había mentido respecto a los motivos de la guerra de Irak, prueba es que que aproximadamente ese porcentaje se oponía a que reeligieran a Bush. A todos les resultaba claro que era una mentira para apropiarse del petróleo iraquí y llevar a cabo negocios multimillonarios a cambio de asesinar a sus ciudadanos con la mentira de que les llevarían democracia cuando lo único que les han llevado es muerte y sufrimientos además de que han destruido a uno de los países más antiguos de la Tierra cuya riqueza cultural han hecho pedazos.

Sólo los estadounidenses no se daban cuenta del engaño, ahora salen con que ¡oh sorpresa! fuimos engañados. Incluso muchos aceptan el engaño y pretenden justificarlo porque siguen creyendo en que el terrorismo los persigue, cuando son ellos los que aterrorizan a todo aquel que no se ciñe a sus planes hegemónicos desde hace muchos años.

Siguen creyendo es su medios masivos que les tienen lavado el cerebro, los comentarios que se pueden encontrar en internet llegan al grado de considerar a Noam Chomsky ¡terrorista!, su ignorancia es altamente peligrosa. En muchas escuelas enseñan la "teoría creacionista", (¿dentro de cien años aceptaran la teoría darwinista?), a los niños los llevan a disparar con armas de alto calibre como parte de su formación, otros los preparan como soldados de Dios y los ponen en trance...

El atraso de los Estados Unidos no podrá salvaguardarse sólo con dinero. Es el imperio más nefasto que haya tenido la humanidad.

Esta noticia da hasta risa si no fuera porque es patética:

Senado publica informe que prueba que Bush mintió para provocar la invasión a Irak


Por: Público (España)

Nota: Los informes, en inglés, pueden encontrarse en esta página del Senado estadounidense.
05 de junio 2008. -

Han tardado cuatro años, pero al final el Senado de EEUU ha difundido el último informe público que desvela el alcance de la manipulación previa a la invasión de Irak. El Comité de Inteligencia del Senado demostró que las autoridades norteamericanas justificaron la guerra, frente a sus ciudadanos y al mundo, echando mano de informaciones de inteligencia nada fiables o simplemente exagerándolas para hacerla coincidir con sus necesidades.

El presidente del Comité, el demócrata John Rockfeller, no se anduvo con rodeos al presentar sus conclusiones: “Una cosa es depender de información de inteligencia incorrecta y otra presentar una imagen a los estadounidenses sabiendo que es equivocada”, afirmó.

Los parlamentarios llevaron a cabo un trabajo escrupuloso. Compararon los principales discursos del presidente y de los miembros de su Gobierno con la información de los servicios de inteligencia que tenían entonces en sus manos.

Sin base

La conclusión es inapelable: “Antes de involucrar al país en la guerra, este país debía dar a los norteamericanos una imagen precisa al 100%”, explicó Rockfeller. “Lamentablemente, nuestro Comité concluyó que el Gobierno dijo varias cosas que no tenían ningún apoyo de inteligencia”, añadió. En otras palabras, Bush y los suyos mintieron, aunque el informe y los políticos se cuiden de utilizar esa palabra que constituye una grave acusación en Estados Unidos.

El vicepresidente Dick Cheney, por ejemplo, denunció varias veces la existencia de una relación entre Al Qaeda e Irak. El 8 de septiembre de 2002, en plena conmemoración del primer año de los atentados del 11 de septiembre, aseguró que un alto miembro del Gobierno de Sadam Husein se había reunido en Praga con Mohamed Atta, uno de los autores de los ataques. Rotunda conclusión de la comisión: “No hemos podido confirmar esa reunión”. Años de investigación inútil revelan que probablemente no existió.

Engañados

Sus miembros denunciaron “los esfuerzos implacables del presidente y sus consejeros por utilizar la guerra contra Al Qaeda como justificación para derrocar a Sadam Husein”. “Describir a los estadounidenses que ambos estaban asociados engañó a la nación”, aseguraron. La acusación sobre la existencia de un programa nuclear iraquí también quedó en evidencia: “Las declaraciones de la Administración de Bush no comunicaba las discrepancias sustanciales que existían entonces en la inteligencia”.

Para confirmar muchas de los engaños ya conocidos, la comisión necesitó más de cuatro años y un cambio de mayoría en el Congreso tras las elecciones de 2006. En 2004, cuando los republicanos controlaban ambas cámaras, un primer informe se había centrado en los errores de los servicios de inteligencia. Ahora se trataba de examinar el uso que los políticos hicieron de esos datos: “Esta Administración distorsionó la información de inteligencia para ir a la guerra”, acusó la senadora demócrata Dianne Feinstein, miembro del Comité.

El portavoz republicano en la comisión, Christopher Bond, se negó a aprobar el informe. Rockfeller recordó que su colega presentó 170 enmiendas al documento. La mitad fueron aceptadas. Aún así, se negó a dar su aprobación a un informe que cae en mal momento: en plena campaña electoral. El candidato republicano a la Casa Blanca John McCain apoyó la guerra y sigue justificando la presencia militar en Irak.

Barack no estaba aún en el Senado cuando los congresistas autorizaron en 2002 la invasión. Lamentablemente para la derrotada Hillary Clinton, que sí apoyó la moción, el documento sale tarde. Durante la campaña, dijo que había dado su aval a la guerra por haber sido engañada por Bush. Como lo fueron todos los norteamericanos.

¿Así que el Senado de los Estados Unidos no sabía que todo era una patraña, cuando muchos millones del planeta sin gigantescas y costosas agencias de espionaje lo sabíamos? No queda más que pensar que el Senado de los Estados Unidos realmente tiene gravísimas limitaciones de inteligencia, o bien, que están mintiendo, que lo sabían pero le dieron preferencia a sus negocios y a su espíritu bélico y hegemónico, y ahora que están en período electoral salen con que no lo sabían, más o menos lo que ocurrió con los nazis. Ambas razones son inaceptables, los crímenes y el genocidio que han y siguen cometiendo no será fácilmente perdonado ni olvidado por las víctimas ni por el resto del mundo que se ha cansado de protestar por sus atrocidades.

No hay comentarios.: