miércoles, septiembre 09, 2009

Los partidos ya habían rechazado a Suárez Coppel para Pemex

Lo impugnaron como consejero por colaborar en la quiebra y privatización de la empresa
El nombramiento es un error grave del Ejecutivo, coinciden senadores del PRI y PRD
Se escogió a una mala persona: Labastida
Fue acusado de beneficiar a hijos de Sahagún

Andrea Becerril y Víctor Ballinas

El recién nombrado director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Juan José Suárez Coppel, fue propuesto a principios de año por Felipe Calderón como consejero independiente de la paraestatal, lo que fue rechazado por todas las fuerzas políticas, ya que consideraron que no podía asumir tal responsabilidad alguien que colaboró en la estrategia para llevar a la empresa a la quiebra y luego privatizarla, revelaron ayer los senadores Francisco Labastida Ochoa, del PRI, y Graco Ramírez, del PRD.

En entrevista por separado, ambos legisladores coincidieron en que es un error grave del Ejecutivo que después de ese rechazo del Congreso a Suárez Coppel, ahora hasta director de Pemex lo nombró. Advirtieron que vigilarán la actuación del funcionario, porque todo indica que llegó para avanzar en la entrega del petróleo al extranjero, a pesar de la reciente reforma energética.

La decisión tampoco fue bien recibida por la mayoría de los senadores de Acción Nacional, quienes en reunión previa a la sesión expresaron su inconformidad con el nombramiento.

El priísta Labastida Ochoa, presidente de la Comisión de Energía, dijo que se escogió a una mala persona, porque junto con el ex secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, diseñó el régimen fiscal para Pemex que permitía a las autoridades tributarias quitarle a la empresa cerca de 85 por ciento del valor de la producción de gas y petróleo.

Para que Labastida diga que "se escogió a una mala persona", ¡cómo será la cosa!

La Secretaría de Hacienda obligaba además a Pemex a producir 3 millones y medio de barriles diarios, en una actitud irresponsable de sobrexplotación de los yacimientos, que generó en buena medida la abrupta caída de la producción que hoy vivimos. Esto, recalcó, originó la quiebra financiera de la empresa, en un acto deliberado, para propiciar que fuera luego vendida tanto a nacionales como extranjeros.

Por ello, lo menos que se puede pensar, agregó el ex candidato presidencial del PRI, es que mandan a Suárez Coppel a Pemex con la intención de que avance en la privatización de la petrolera.

Por separado, el secretario de la Comisión de Energía, el perredista Graco Ramírez, dijo que Calderón entregó Pemex al grupo de Gil Díaz y del banquero Roberto Hernández, vía alguien como Suárez Coppel, quien a su paso por Pemex dejó acusaciones de haber beneficiado con contratos a personajes foxistas, entre ellos los hijos de Marta Sahagún.

Recordó que durante las negociaciones para el nombramiento de los consejeros independientes de Pemex, en enero de este año Calderón les pidió valorar la candidatura de Suaréz Coppel y todas las fracciones, incluida la del PAN, lo rechazaron. Ya no envió el nombramiento porque sabía que se votaría en contra.

Fecal tenía que pagarle a este sujeto antes de irse pues fue uno de los que le apoyó en el fraude.

El senador panista Rubén Camarillo no quiso hablar del tema. Cuando se le preguntó su opinión sólo dijo: espero que le vaya bien. Pero en reunión privada, muchos panistas expresaron su desacuerdo, a tal grado que ninguno de los integrantes de la Comisión de Energía aceptó fijar la postura de su bancada en la sesión del próximo jueves en que se analizará el tema.

Aquí la cuestión es que quien gobierna México no son los tres poderes, éstos están sujetos a lo que decida la oligarquía del país y el extranjero y tiene que ser alguien que les entregue Pemex.

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